Sigue nuestras redes sociales

Realizar una búsqueda

Martín Rodríguez Hernández Noticias TlaxcalaMartín Rodríguez Hernández Noticias Tlaxcala

Opinión

Rebelión en la granja

ARTURO POPOCATL
Por: Arturo Popocatl

La  llegada de ex priistas, ex panistas y ex perredistas al Partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), que desplazan cada vez más a los verdaderos morenistas que fundaron a ese instituto político, y entre más acotada está la participación democrática en la búsqueda de candidaturas que den un respiro a la castigada militancia guinda, se acerca el momento de saber si la estrategia dictada desde Palacio de Gobierno fue la adecuada o se tradujo en un sonoro fracaso electoral.

¿Pero qué sería un fracaso electoral para Morena y sua aliados, sobre todo los del Verde Ecologista de México (PVEM) y del Trabajo (PT)?

Primero, perder la cómoda mayoría que tienen en el Congreso del Estado, la cual hasta ahora les ha permitido aprobar designaciones en los órgano autónomos y en magistraturas dentro del Tribunal Superior de Justicia del Estado (TSJE); el paquete económico, que incluye el presupuesto de egresos; y reformas legales y hasta constitucionales que han permitido manejar designaciones más cómodas en instituciones clave, tales como el Órgano de Fiscalización Superior (OFS) y la Secretaría de Gobierno.

Y, segundo, perder municipios importantes que ganaron hace tres años, tales como Tlaxcala, Chiautempan, Huamantla, San Pablo del Monte y Zacatelco, por mencionar algunos. La pérdida sería importante porque con los municipios debe haber la coordinación mínima necesaria para combatir la inseguridad, y porque es en los cabildos donde se avalan las reformas constitucionales.

Si la ciudadanía considera que las cosas se están haciendo bien desde Palacio de Gobierno, ese aval pasará automáticamente al resultado de las elecciones.

Hasta ahora, sin embargo, se ve difícil el panorama electoral para Morena. No es sólo el desgaste del gobierno en los municipios, considerados de bastante baja calidad, por decir lo menos, sino también el desgaste desde la titularidad del Poder Ejecutivo, donde todo nombramiento en la estructura gubernamental tienen el visto bueno de Palacio de Gobierno.

A eso hay que agregar el hecho de que en las candidaturas hay un claro asomo antidemocrático por la discrecionalidad con que se ha manejado el proceso. Ejemplo de ello son las distintas aspiraciones que un solo actor puede tener.

Alfonso Sánchez García es el ejemplo más claro de eso, al aspirar primero al Senado de la República y ahora, más recientemente, a la presidencia municipal de Tlaxcala. Pero no es el único. Ahí está también Lenin Calva Pérez, quien se registro en el proceso interno de definición de candidato en uno de los distritos electorales federales, resultando ahora que busca la elección consecutiva, que no es otra cosa que la reelección.

Por supuesto que no son los únicos casos, pero sí son lo bastante representativos para la reflexión que se pretende hacer en este espacio. Es decir, las candidaturas no están abriéndose a la militancia, sino que están rolándose entre contados elegidos.

¿Qué mérito tiene Sánchez García para aspirar, primero, al Senado de la República y, segundo, a la presidencia municipal de Tlaxcala? ¿Qué mérito tiene Lenin Calva para buscar la reelección siendo su mediocre productividad como legislador local?

Si la incorporación de nuevas caras al gabinete, o al menos en la administración pública, se ha complicado sobre manera por la presencia de oriundos de otras entidades de la República, y si ahora la candidaturas están copadas por pocos elegidos, ¿no surge entonces la posibilidad real de inconformidades en la militancia?

Más aún si los resultados en los ayuntamientos gobernados por Morena y sus aliados han dado mediocres resultados, y donde, incluso, los pleitos internos se han exacerbado como es el caso de Tlaxcala, donde uno de los suyos reprobó la cuanta pública del ejercicio fiscal 2022.

Los ajustes de cuentas entre los propios morenistas están a la orden día, y es claro que la granja está alborotada. No vaya a terminar, como puede suceder, en una rebelión.

Si todo lo anterior no es aprovechado por la oposición, entiéndase PAN, PRI y PRD, entonces ¿qué habrá de suceder para que levante electoralmente? Ya falta menos para saberlo.

También podría interesarte...

Estado

En el 2013, un grupo de empleados del municipio de Texóloc fue despedido de manera injustificada por el entonces alcalde Martín González Hernández, 11...

Opinión

Mientras la oposición a los actuales gobiernos estatal y federal -llámese partidos Acción Nacional (PAN), Revolucionario Institucional (PRI) y de la Revolución Democrática- se...

Deportes

Figuras de la talla de Moisés Beristáin Gutiérrez, único tlaxcalteca ganador del Premio Nacional del Deporte, estuvo presente haciendo gala de su profesionalismo. Alrededor...

Opinión

Los abriles son así. El calor ebulle toda su ilusión y su casi poesía primaveral, luego, la esperanza con la que se proclama tras...