Por fin, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) en Tlaxcala dio muestras de vida y ayer presentó la estructura estatal que operará en las elecciones de 2024.
Con un discurso conciliador buscando la unidad al interior del tricolor, la presidenta del Comité Directivo Estatal (CDE), Anabell Ávalos Zempoalteca, anunció los perfiles que estarán al frente de cada secretaría del partido para construir un proyecto competitivo en los comicios del año próximo.
“No hay ruptura, no hay enojo. Este es un PRI tolerante”, afirmó la ex candidata a la gubernatura.
Esta postura me parece sensata e inteligente ante el momento actual que vive el tricolor en el estado y a nivel nacional, si hay algo que no pueden permitirse los militantes es perder tiempo en pugnas internas, buscando culpables y reviviendo rencores de antaño.
Si como dijo Ávalos Zempoalteca quieren ser una oposición responsable y unida deben dejar de lado los protagonismos y enconos que en nada abonan a la estrategia de recobrar la confianza de los votantes.
La recomposición que propone la dirigencia estatal del PRI es un buen inicio para sentar las bases de un proyecto viable que le permita por lo menos recuperar posiciones y presencia, previo a las elecciones. Aunque a muchos no les agrade ver “cartuchos quemados” y pocos sean rostros nuevos.
El despertar del priismo local se da después de las declaraciones de militantes de partidos opositores que señalaron que el partido está “muerto”, y si bien en el escenario nacional existe un rechazo al priismo de antaño, en la política resulta riesgoso descartar anticipadamente a quienes después pueden convertirse en tus aliados.
Ni el PAN, ni el PRD pueden pecar de soberbia y creer que una coalición opositora sin el Revolucionario Institucional les puede dar resultados, es dispararse en el pie y el tiempo será quien acabe por mostrar la realidad de cada institución.
La tendencia nacional en el PRD es desmarcarse de la alianza, ya que se sienten desplazados y “ninguneados” en algunos estados por el PRI y el PAN, y ya han amagado con abandonar la coalición para continuar solos su camino a la elección. Ese es el inicio el final para el partido amarillo.
Si el perredismo local decide replicar esta postura, créame que está condenado a su extinción, ya que incluso, su dirigente Julio César Pérez González ha tenido que salir a desmentir los rumores de renuncia al partido del alcalde de Xicohtzinco. Luis Barrosos y el diputado local Ever Campech.
En cambio, dentro del tricolor tlaxcalteca las alianzas más que una opción son necesarias para dar pelea y resurgir políticamente, por lo que priorizarán la unidad con otras fuerzas para llegar mejor posicionados al 2024.
La estrategia de los priistas tlaxcaltecas parece que no hace mucho eco en la dirigencia nacional; a pesar de que Anabell Ávalos se mostró respetuosa del trabajo de los ex gobernadores emanados del tricolor, es un hecho, que el ex mandatario Mariano González Zarur y el junior diputado federal Mariano González Aguirre están concentrando todos sus esfuerzos en la contienda del Estado de México.
El interés de los González por el Edomex responde más a un asunto afectivo y familiar que a una cuestión partidista, ya que la abanderada del PRI en el último bastión del ex partidazo, Alejandra del Moral es la esposa de Mariano González.
Así que descarte que la estructura marianistas operará en Tlaxcala, ya que están más preocupados por lo que ocurre en el vecino estado, y los pocos perfiles de esta corriente que hoy fueron incluidos en la restructuración servirán solo para ser visibles en la entidad.
Con la promesa de que el priismo estatal resurgirá como el ave fénix de entre las cenizas inicia el trabajo del tricolor de cara a la elección más importante en los años recientes y en este andar créame que veremos de todo.
Las tres de ley… 1- La que volvió a acaparar los reflectores a nivel nacional fue la diputada federal, Dulce Silva Hernández, pero no por su importante trabajo legislativo en beneficio de los tlaxcaltecas, sino por presentar un punto en la Gaceta Parlamentaria con el que busca la denominación de origen de los tacos de canasta.
Así es, Dulce Silva quiere que todo el país reconozca a Tlaxcala como el creador de este popular antojito que tiene presencia en la capital del país y otros estados del centro de la República.
2.- En la exposición de motivos la diputada federal por Tlaxcala señaló que “el recipiente y el vehículo en que son transportados los tacos de canasta” son elementos característicos que surgieron en la entidad, por lo que exhortó a la Secretaría de Economía y al Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) iniciar el proceso correspondiente.
La propuesta de entrada resulta absurda y no procederá debido a que los tacos de canasta no cumplen con los requisitos para recibir la denominación de origen, ya que este concepto se utiliza para nombra a una región geográfica del país que sirva para designar un producto originario de la misma, y cuya calidad o características se deban exclusivamente al medio geográfico.
Sin embargo, el aprovechar este elemento como instrumento para detonar el desarrollo regional y de comunidades en Tlaxcala es un acierto pues en el estado hay una riqueza culinaria que merece ser conocida y reconocida por todo el país.
3.- Entre los productos que son endémicos de Tlaxcala están el mole negro de huitlacoche, los mixiotes, el tamal tatemado que no lleva masa sino requesón y nopales y el xolostle de hongos y nopales.
El hecho de explorar estas ideas como opciones para impulsar zonas específicas del estado y sus habitantes es positivo, y aunque los tacos de canasta no obtendrán la denominación de origen todos sabemos que la mejor preparación de los mismos surgió en San Vicente Xiloxochitla, en Nativitas. ¡Provecho!.