La presión era mucha para haberla dejado pasar. Y para que un compromiso asumido en público y en cadena nacional por el presidente Andrés Manuel López Obrador no se cumpliera.
La frecuencia XHTLAX–FM, 96.5 FM, Radio Altiplano, regresa al redil, esto es, al control del gobierno estatal, de donde nunca debió haber salido.
Efectivamente, Radio Altiplano había pasado a manos privadas a través de un arrendamiento concretado con GA Radiocomunicaciones S.A. de C.V., empresa que edita El Heraldo de México.
El presidente de la República, en una de sus conferencias mañaneras, supo del tema a través de un reportero que le dio una amplia explicación del caso.
Al final, el presidente se comprometió a hacer una revisión del tema, pero de entrada hizo un llamado a la Gobernadora. Con diplomacia, pues se trataba de una de las suyas: “No es una orden, sino un llamado” a la rectificación.
“Es muy buena gobernadora Lorena (Cuéllar Cisneros), muy buena, a lo mejor puede ella rectificar y nosotros le ayudamos, vamos a pedirle a Jenaro Villamil (presidente del Sistema Público de Radiodifusión del Estado Mexicano) que platique… se puede llegar a un acuerdo y hay que saber rectificar y no caer en la autocomplacencia y para blindar habría que verlo en la legislación…”, dijo cuando se abordó el asunto en Palacio Nacional.
Era claro que el presidente de la República no estaba de acuerdo con la entrega de Radio Altiplano al grupo de El Heraldo de México. Esto que le escribo sucedió en octubre de 2023.
Es decir, tuvieron que pasar ocho largos meses para que el control de la programación regresara a la Coordinación de Radio, Cine y Televisión de Tlaxcala (Coracyt).
Llama la atención que El Heraldo Radio haya dejado su transmisión en Radio Altiplano justo después de pasada la jornada electoral del 2 de junio. Y, además, a tres meses de que se cumpliera un año de la firma del convenio, justo cuando iba a concluir.
De acuerdo con la información disponible, una de las cláusulas del contrato entre el gobierno estatal y GA Radiocomunicaciones S.A. de C.V. establecía la posibilidad de que el contrato se concluyera cuando alguna de las dos partes así lo determinara. Pero no se hizo antes, lo cual es indicativo de que el proceso electoral sí tuvo que ver en los intereses de ambas partes para llegar al convenio de cesión.
¿Qué viene ahora? Sin duda el cumplimiento del compromiso por parte de la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros.
En noviembre del año pasado, la titular del Ejecutivo adelantó que en este 2024 se invertirían 80 millones de pesos para equipar y modernizar a la Coracyt, la cual -dijo- había estado abandonada por años. Hasta ahora no se sabe nada.
Lo cierto es que de todo esto se puede rescatar una noticia positiva: que Televisión de Tlaxcala no pasará a manos privadas, tal y como sucedió con Radio Altiplano. Eso, parece, pero ya veremos porque las sorpresas suelen surgir en cualquier momento.
Si esos 80 millones de pesos prometidos no han sido invertidos, el actual es buen momento para planearlos en el presupuesto de 2025. Se está a excelente tiempo para hacerlo.
Por ahora, las buenas noticias con respecto a Radio Altiplano regresan. Se les cayó el negocio o al menos se les quedó a medias.
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