El Partido de la Revolución Democrática (PRD) en Tlaxcala se sintió traicionado. Los partidos Acción Nacional (PAN) y Revolucionario Institucional (PRI) madrugaron desde hace semanas a los perredistas y comenzaron a mover sus propias piezas, por su cuenta, poniéndose de acuerdo en la repartición de municipios e incluso candidaturas, para las elecciones locales de 2024.
Apizaco, Chiautempan, Tlaxcala, Huamantla, en fin, los municipios más importantes del estado prácticamente estaban -están- repartidos entre priistas y panistas, situación que dejaba en franca desventaja al perredismo, que se sintió plato de segunda mesa y con enormes posibilidades de perder el registro en el estado. Por eso fue el disgusto del PRD.
Esa fue la antesala de lo que este martes se dio a conocer: que el PRD iría en solitario no sólo para las elecciones locales en Tlaxcala, sino también para las Senadurías y las diputaciones federales, es decir, la elección federal. El único vínculo que tendrían sería el apoyo a Xóchitl Gálvez para la presidencia de la República, nada más.
La determinación del Consejo Estatal del PRD en Tlaxcala tomó descolocadas a las dirigencias nacionales de los tres institutos políticos -incluida la perredista- que acordaron en cúpula la distribuación de las fórmulas para el Senado.
En el caso de Tlaxcala, la candidatura de la primera fórmula al Senado de la República se acordó para el PRI, mientras que al PRD le fue asignada la segunda. No solo, será mujer quien la encabece. El nombre ya está decidido y corresponderá a la dirigente estatal, Anabel Ávalos Zempoalteca.
El dirigente nacional del PRD, Jesús Zambrano Grijalba, está de acuerdo en otorgar esa posición para la ex candidata a la gubernatura. La idea era que el PRD encabezara la segunda fórmula con el nombre de Manuel Cambrón Soria.
La tarde-noche del lunes, y parte de la madrugada del martes, fue de mucha negociación entre Jesús Zambrano y Manuel Cambrón, pero no hubo acuerdos.
El PRD en Tlaxcala se siente desplazado y, en esa circunstancia, actúa en consecuencia. La decisión ya fue tomada el pasado fin de semana por el Consejo Estatal del sol azteca: vamos solos, dijeron los consejeros políticos estatales.
En las dirigencias nacionales del PAN, PRI y PRD hay preocupación porque la escisión de Tlaxcala y Oaxaca le resta votos a la coalición ya registrada ante el Instituto Nacional Electoral (INE), denominada Fuerza y Corazón por México.
Y aunque, en estricto sentido, la decisión de ir juntos depende solamente de las mismas dirigencias nacionales, una decisión unilateral de todas formas pondría en riesgo el respaldo total.
Es decir, habría una huelga de brazos caídos, por lo menos en lo que respecta a la coalición en el estado de Tlaxcala.
Las dirigencias partidistas cuentan con un plazo de 48 horas para hacer modificacIón a su convenio de coalición registrado ante el INE. La modificación, sin embargo, dependenderá de cómo queden los acuerdos en lo estatal, sobre todo si el PRI y el PAN siguen en su plan de agandalle.
Por lo demás, en lo que hace a la aspiración del diputado federal Mariano González Aguirre de llegar a la Cámara de Senadores, todo hace indicar que tendrá que recurrir a su amigo, el dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno “Alito”, para colocarlo ahí, pero a través de una candidatura de representación proporcional.
Así que las presiones y las negociaciones están en proceso. Lo mismo está sucediendo en todas las instituciones políticas, la llegada de Alfonso Sánchez García por el Partido Verde lo vendrá a confirmar.
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