El Tianguis Turístico 2023 puede significar para Tlaxcala un punto de inflexión que detone la tan anhelada consolidación del estado como destino que ofrece experiencias culturales y gastronómicas inigualables además de productos turísticos únicos en la zona centro del país.
Más allá del discurso de que la entidad aprovechará al máximo la proyección que representa el Tianguis y de la expectativa que se ha generado desde la Secretaría de Turismo del Estado (Secture) en torno a la participación del estado en el evento internacional, existen elementos para pensar que esta edición puede ser histórica para Tlaxcala.
Ayer, la atención de la prensa nacional y de los medios internacionales se centró en la inauguración del stand de Tlaxcala y la proyección que alcanzó el estado tan solo con ese acto protocolario fue enorme.
Al corte del listón del espacio que ocupará la entidad durante toda esta semana para promocionar sus atractivos acudieron además de la gobernadora Lorena Cuéllar y el secretario de Turismo federal, Miguel Torruco el cantante huamantleco Carlos Rivera, lo que provocó que, como pocas veces, los ojos de todo el país se posaran sobre Tlaxcala.
Quienes en su momento criticaron el hecho de que el gobierno del estado aprovechara el impacto mediático de Carlos Rivera para promocionar la marca turística del estado, seguramente hoy estarán despotricando al ver que la estrategia empieza a rendir frutos.
Los mismos que hoy se rasgan las vestiduras señalando el gasto que se realizó en las acciones de promoción turística que incluyeron la grabación del video musical “Te soñé” del cantante huamantleco, olvidan que hace unos años pasó algo similar solo que con pésimos resultados.
Fue el 25 de noviembre de 2011 cuando, a capricho del exgobernador priista Mariano González Zarur, se organizó un concierto del tenor mexicano Plácido Domingo en el Estadio Tlahuciole, en ese entonces, el dinero público que se invirtió fue millonario debido a los requerimientos técnicos que implicaba el espectáculo de ópera al aire libre.
Pero los críticos de hoy, callaron y no dijeron ni una palabra a pesar de que nunca se transparentaron los recursos que se utilizaron para pagar la presentación de Plácido Domingo, que en ese tiempo se habló de un monto superior a los 50 millones de pesos. Leyó usted bien: ¡¡50 millones de pesos!!
Y ¿Sabe usted quién estaba a cargo en ese entonces de la Secretaría Turismo del Estado? El mismísimo Marco Antonio Mena Rodríguez, quien fue el encargado de cumplirle el deseo a su jefe de ver a su cantante de ópera favorito en Tlaxcala.
La estrategia fue tan mala que terminaron por obligar a los burócratas estatales a pagar boletos para el show, quienes de manera “voluntaria” desembolsaron hasta dos mil pesos por las entradas.
En aquel tiempo ambos personajes no se cansaron de repetir que con este evento de caché “Tlaxcala estaría en los ojos del mundo” y se incrementaría el número de turistas no solo nacionales sino internacionales, que llegarían a la tierra de Tlauhicole. Eso nunca pasó..
Y nunca sucedió ya que el opulento evento nada impactó a la industria turística como nos lo prometieron, en conclusión la presencia del tenor mexicano no ayudó a la promoción de Tlaxcala en lo absoluto.
A diferencia de los caprichos de González Zarur, hoy la gobernadora Lorena Cuéllar ha sabido aprovechar el arrastre mediático de Carlos Rivera para potenciar las acciones turísticas que se impulsan desde la administración estatal. ¿Alguien duda de la popularidad del huamantleco?
El éxito de la estrategia radica en que Lorena Cuéllar eligió un cantante popular oriundo del estado para captar la atención de la gente, mientras que Mariano González Zarur prefirió anteponer sus gustos personales y escuchar ópera en el Estadio Tlahuicole.
La apuesta del gobierno del estado para potenciar el turismo siempre ha sido organizar eventos disruptivos que generan polémica pero al final se traducen en resultados y beneficios para el sector como el Mundial de Voleibol de Playa.
Hoy Tlaxcala cuenta con una marca turística que a pesar de las críticas, o mejor dicho, resultado de esas críticas, se ha colocado en el escenario nacional y todo mundo habla del “Tlaxcala sí existe”.
Las estrategias que nacen desde la Secture, hoy han colocado a Tlaxcala en un plano que antes no se alcanzaba y desde donde se puede materializar la consolidación del estado como destino turístico ideal. ¿Qué eso va a costar dinero?, es obvio, pero vistos los resultados la inversión vale cada peso.
Las tres de ley… 1- Esta semana las buenas noticias seguirán para el estado, ya que en el marco del Tianguis Turístico 2023, Tlaxcala recibirá de parte la Organización Mundial de Turismo (OMT) el registro del Observatorio Turístico Sustentable.
Con este registro Tlaxcala se une a la red de la OMT y se convierte en el país número 37 a nivel mundial en contar con este instrumento.
2.- La importancia de este logro radica en que Tlaxcala es apenas el cuarto estado del país en contar con un Observatorio Turístico Sustentable lo que significa una ventaja sobre otras entidades del país que aún no se suman a esta dinámica.
La propia secretaria de Turismo, Josefina Rodríguez Zamora ha señalado que el Observatorio permitirá la toma de decisiones más certeras que fortalezcan a la industria local.
3.- El Observatorio Turístico Sustentable es un sistema que recoge y analiza datos con base en las necesidades y preguntas estratégicas que se hacen en torno a un destino o recurso turístico, lo que significa, que en un par de años Tlaxcala contará con información real y útil para mejorar las acciones de promoción.
Esto refleja que la política turística del estado empieza a tomar forma después de que durante años por la Secture desfilaron perfiles sin vocación ni interés por hacer crecer a Tlaxcala en el ámbito del turismo.
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