El Congreso de los Diputados de España aprobó este miércoles una iniciativa de ley para instar al gobierno de Pedro Sánchez a que reconozca como presidente electo de Venezuela a Edmundo González Urrutia, líder opositor que llegó a Madrid el domingo para solicitar asilo político.
La iniciativa, en el fondo simbólica, salió adelante por 177 votos a 164 gracias al apoyo de los principales partidos de oposición, Partido Popular y Vox, así como los regionalistas del Partido Nacionalista Vasco, Unión del Pueblo Navarro y Coalición Canaria.
En la tribuna de invitados estuvieron Leopoldo López y Antonio Ledezma, dos líderes opositores venezolanos también exiliados en España, así como Carolina González, la hija de Edmundo González.
Sánchez, que se refirió a González Urrutia como un “héroe al que España no abandonaría”, dijo desde China que su Ejecutivo no tiene por el momento la intención de reconocer oficialmente al líder opositor venezolano como legítimo presidente de su país, en consonancia con la postura actual de la Unión Europea (UE).
“Impulsar la transición” en Venezuela
La propuesta comenzó a debatirse la tarde del martes, cuando cientos de simpatizantes de la oposición venezolana se manifestaron a las puertas del Congreso, coreando eslóganes contra el presidente Maduro y a favor de María Corina Machado, la líder de la oposición que delegó la candidatura en Edmundo González al ser inhabilitada.
Durante el debate, la diputada Cayetana Álvarez de Toledo, del PP, dijo que la iniciativa sirve “para impulsar la transición” y pidió a Sánchez que “trabaje para que el 10 de enero Edmundo González Urrutia jure su cargo y quien salga rumbo al exilio sea Nicolás Maduro”.
Por su parte, la diputada socialista Cristina Narbona recordó, en nombre del Gobierno, el precedente de Juan Guaidó, que ya fue reconocido como presidente de Venezuela por muchos países “y no tuvo ninguna utilidad”.
El domingo, González Urrutia llegó a Madrid en un vuelo fletado por el Gobierno de España para recibir asilo político. En una carta dirigida a los venezolanos el lunes, este antiguo diplomático de 75 años dijo haber partido tomado la decisión de irse “pensando en Venezuela”.
“Nuestro destino como país no puede, no debe ser, el de un conflicto de dolor y sufrimiento”, afirmó.
Con información de: Univision